¡Así es la vida!

En Valencia, hoy, desde la tarde hasta la noche, no ha parado de llover. Estoy sentando en mi habitación con la intención de acabar poco a poco mi trabajo del máster, pero sin esperanza. Tengo que buscar los extranjerismos en dos revistas de El Jueves, y con 60 páginas y pico creo que no voy a poder terminarlo esta noche... Mañana tengo que leer para el seminario de Luis Cortés Rodríguez, que son dos libritos sobre el Comunitario pragmático de comunicación oral. Se dice que 'nada es imposible', pero la verdad parece siempre lo contrario. 

Hoy en clase fue un día estupendísimo. Repito, ¡estupendísimo! La primera clase fue tan normal que habló de la película 'El Lector (The Reader)' y la relacionó con la vergüenza humana ante el analfabetismo. La segunda clase fue la más interesante, que el profesor me prestó mucha atención hasta que me eseñó qué paginas tuve que mirar. Me hizo sentir como una imbécil y analfabeta. Acabé con las ganas de darle a alguien golpes...

El enfado también afectó a la compañera sentada a mi lado. ¡Mi probecita coreana!

Cuando terminamos las clases del martes todavía no paró de llover. Fuimos yo y mi compañera coreana a una tienda china cerca de la uni y compré un paraguas de 6,00 euro. Es bastante grande así que cabe más de una persona...

¡Estoy enamorada del País Valenciano!